Latxaska Etxea, la esencia de la mejor cocina vasca en los aledaños del Matadero

Autentico, entrañable y acogedor. Así podemos resumir en pocas palabras la esencia de Latxaska Etxea. Una parada obligada en la capital para los amantes de la buena mesa, que nos adentra en una formidable propuesta culinaria en la que destacan varias elaboraciones que han sido premiadas en diferentes certámenes gastronómicos. Su último reconocimiento, durante la pasada edición de Pulpo Pasión, en la categoría del mejor pulpo de vanguardia de la Comunidad de Madrid, nos recordaba nuevamente que Latxaska Etxea es todo un referente en la capital de la mejor cocina vasca.

Su artífice, el encantador bilbaíno Máximo Alesanco, nos abre las puertas de la mejor cocina de su tierra en su pequeño gran proyecto protagonizado siempre por su emblemática parrilla de encina. Una cocina de producto donde no faltan espectaculares pescados y fantásticos cortes de carne que alcanzan su punto álgido tras pasar por las brasas.

En la cocina de Latxaska Etxea, el carismático Iñaki Rodaballo, versiona recetas de siempre aportándoles toques de vanguardia que logran sorprender y conquistar a los paladares más exigentes. Una cocina que merece la pena maridar con las propuestas que nos sugiere Miguel Ángel Martiañez sumiller de Latxaska Etxea para que la aventura sea absolutamente inolvidable.

En sala, el encantador Carlos Pérez nos adentra en la esencia del restaurante sugiriéndonos siempre las opciones que más se adapten a nuestros gustos para que siempre acertemos.

En nuestra visita a Latxaska Etxea nos recibieron con un riquísimo aperitivo en forma de cremita de legumbres con trufa. Una agradable y sugerente bienvenida que dio paso a sus galardonadas patatas bravas bautizadas como Candy Crunch Brava (receta ganadora en Palencia Brava 2021). Con una llamativa presentación y un rotundo sabor, nos conquistaron desde el primer mordisco antes de pasar a probar la original ensalada de verdel, que elaboran con tomate rosa, manzana Granny Smith y cremoso de clorofila. Atrevida y diferente, desembocó en la espectacular copa de chips & ron. Un plato que con base de gelatina de ron con cremoso de patata, chipirón salteado y chip de remolacha que nos hará volver pronto a Latxaska Etxea. Mientras nos deleitábamos con sus exquisitos matices llegó a la mesa una impresionante chuleta de vaca madurada con patatas fritas caseras que es un verdadero espectáculo. Sabor en estado puro. Calidad en palabras mayúsculas.

Para terminar, recomendamos probar su tarta de queso casera que es una verdadera delicia.

Latxaska Etxea, una parada obligada en la capital donde saborear una autentica propuesta de la mejor gastronomía vasca. Sin duda, el destino ideal para los amantes del buen comer… ¡Y del mejor beber!