Fundada en 1991, La Zagaleta se extiende majestuosamente sobre más de 900 hectáreas de bosque mediterráneo, ofreciendo vistas panorámicas que alcanzan Gibraltar y las costas africanas desde sus imponentes villas.
El misterio rodea a los dueños de las más de 200 mansiones dispersas por lo que alguna vez fue el coto de caza privado de Adnan Khashoggi. Tras la subasta de estos terrenos en 1989, un conglomerado de inversores españoles, suizos, alemanes y estadounidenses se hizo con la propiedad. Enrique Pérez Flores, líder de la operación en aquel entonces y hoy presidente honorífico de la compañía, apostó por desarrollar un exclusivo modelo residencial con servicios de primera clase. Este incluye dos campos de golf, un club deportivo, centro hípico, helipuerto y hasta un lago privado. Un verdadero paraíso terrenal, accesible solo para unos pocos privilegiados: algunas de estas propiedades han alcanzado precios de hasta 35 millones de euros y pueden superar los 5.000 m² de construcción.
Arquitectura y evolución de la La Zagaleta
Varios arquitectos han dejado su huella en La Zagaleta, siendo Manuel Ruiz Moriche uno de los principales precursores de una arquitectura mediterránea única. Hace 8 años, introdujo una interpretación moderna de la arquitectura vernácula, adaptada al entorno con un lenguaje contemporáneo en el diseño de villas. En este nuevo capítulo de La Zagaleta, el jardín, los espacios abiertos, los materiales naturales y el lujo sutil definen una nueva identidad.
El concepto de lujo silencioso ha revolucionado el desarrollo arquitectónico, enfatizando la selección consciente de conceptos y materiales. Manuel Ruiz se distingue por su atención meticulosa a los detalles, los materiales, las texturas y la iluminación. Su objetivo es crear villas donde los residentes puedan disfrutar de una experiencia de vida distintiva, donde el bienestar físico y emocional se entrelazan. Los interiores espaciosos, las piscinas privadas y las amplias terrazas ofrecen innumerables oportunidades para contemplar las vistas impresionantes que se extienden desde La Zagaleta y más allá.
Villa KAIZEN, el arte que abraza a la naturaleza
Un claro exponente de la reinvención de esta arquitectura es Villa KAIZEN, una residencia que abraza una gran roca para desplegarse en una parcela de 5.000 m2 con vistas al mar.
“Abrazar esa roca en un lugar privilegiado, sin perder de vista el querer realizar una casa para vivir, ha sido el gran reto continuo” comenta el arquitecto Manuel Ruiz Moriche.
KAIZEN, que en japonés significa “mejora continua” se basa en la idea de que pequeños cambios positivos realizados de manera constante pueden llevar a mejoras significativas a largo plazo. Es la idea sobre la que se ha sustentado el diseño de esta villa, consiguiendo que un lugar que es único, mejorase con pequeños cambios para conseguir crear una vivienda.
Para Manuel Ruiz Moriche, “la mejora siempre es continua en nuestro caso y con KAIZEN ha adquirido otra dimensión, con el uso de los materiales naturales, el corte de la piedra, la redistribución de los espacios, la integración del mobiliario, con un análisis exhaustivo de cada vista a la montaña y al mar, incluyendo la roca natural en toda la zona “wellness”, así como una reinvención de la funcionalidad de la zona para trabajo remoto. Con ello, se crea una obra maestra que en paralelo se convierta en un lugar en el que apetece vivir, ubicado en la urbanización más discreta de Europa, la Zagaleta”.
