La exposición “Monet-Mitchell” se complementa con una retrospectiva de la obra de Joan Mitchell, que permite al público francés y europeo descubrir su obra. «Monet – Mitchell» y la «Retrospectiva de Joan Mitchell» presentan la respuesta única de cada artista a un paisaje compartido, que interpretan de una manera particularmente inmersiva y sensual.
En sus últimos cuadros, los Nenúfares, Monet pretendía recrear en su estudio los motivos que observaba detenidamente en la superficie de su estanque de nenúfares en Giverny. Joan Mitchell, por otro lado, exploraría un recuerdo o un sentido de las emociones que sintió mientras estaba en un lugar particular que le era querido, percepciones que permanecieron vívidas más allá del espacio y el tiempo. Estas composiciones abstractas las crearía
en La Tour, su estudio en Vétheuil, un pequeño pueblo francés al que se mudó definitivamente en 1968 y donde Claude Monet había vivido entre 1878 y 1881.
MONET – MITCHELL, DIÁLOGO
Galería 4 a Galería 12
Este otoño, la Fondation Louis Vuitton tiene el placer de asociarse con el Musée Marmottan Monet (Francia), que cuenta con la colección más grande del mundo de obras de Claude Monet, para presentar “Monet-Mitchell”, una exposición dedicada al diálogo entre las obras de Claude Monet obras posteriores (1914-1926), los Nenúfares , y la obra de la artista estadounidense Joan Mitchell.
Única en su alcance y fuerza poética, la exposición “Monet-Mitchell” estará abierta desde el 5 de octubre de 2022 hasta el 27 de febrero de 2023. Abarcará ocho galerías, desde la planta baja hasta los niveles superiores. La retrospectiva de Joan Mitchell, que se exhibirá en el nivel inferior del edificio Frank Gehry, se realizará simultáneamente y permitirá descubrir su trabajo.
Frente a un mismo paisaje, a saber, las orillas del Sena, Monet y Mitchell desarrollaron un enfoque pictórico que definieron en términos similares, con Monet refiriéndose a “sensación” y Mitchell a “sentimientos”. Inspirados en el entorno natural de la región parisina, ambos artistas compartían una aguda sensibilidad por la luz y el color, cuya interacción forma la base de su arte.
A través de Setenta obras emblemáticas de ambos artistas , la exposición ofrece al público un viaje encantador e inmersivo, enfatizado por sorprendentes paralelismos visuales y temáticos. Unas treinta y cinco obras de Claude Monet, incluidas veinticinco obras pertenecientes al Musée Marmottan Monet , ofrecen una visión general de los Nenúfares . Estas pinturas, que rara vez se presentan sin marco, dialogan con treinta y cinco obras, veinticinco pinturas y diez pasteles, de Joan Mitchell.
