El mercado inmobiliario de Estepona se erige como un imán para inversores tanto nacionales como internacionales, consolidándose como uno de los destinos más codiciados en la última década. La metamorfosis que ha experimentado esta ciudad costera la posiciona como un punto de referencia indiscutible en el panorama inmobiliario. Sin embargo, dentro de este floreciente panorama, hay un área que brilla con luz propia: el distrito oeste y el entorno del puerto deportivo.
Conocida históricamente como Seghers, esta región está viviendo una notable revalorización, con el mayor incremento de precios registrado en todo el municipio. Según datos proporcionados por Idealista, el precio medio en esta zona se elevó a 4.417 €/m2 en mayo, marcando un aumento del 2,7%, mientras que el promedio del resto de la ciudad se sitúa en 3.356 €/m2, con un incremento del 1,1%.
A escasos minutos del corazón de Estepona, el Puerto Deportivo y el icónico Mirador del Carmen, enclave que ha erigido a la ciudad como epicentro cultural en la Costa del Sol, se encuentra una zona que despierta un interés sin igual entre inversores y compradores en busca del hogar perfecto en Andalucía o un retiro de ensueño junto al Mediterráneo.
Justo en este distrito, actualmente catalogado como el más exclusivo de la ciudad, se erige el residencial Ikkil Bay, un conjunto de 8 villas en altura que ha validado el éxito rotundo de Estepona como destino premium para proyectos de lujo. Estas viviendas de primera categoría, con estándares de calidad superlativos y servicios exclusivos, sobrepasan cualquier estándar previamente establecido en la zona, reflejándose también en sus precios, que oscilan entre los 2,3 y 4,3 millones de euros.
Con una ubicación privilegiada, en el frente de la emblemática Playa del Cristo, Ikkil Bay captura la esencia de la metamorfosis que está experimentando esta región de la ciudad. Desde un nuevo centro cultural hasta la esperada revitalización del puerto deportivo y la llegada de reconocidas marcas internacionales de restauración y entretenimiento de primer nivel, el entorno de Ikkil Bay promete una experiencia de vida incomparable.
A escasos metros de este residencial, se ubica el puerto deportivo que se encuentra inmerso en un ambicioso proyecto de renovación que pretende convertir estas instalaciones en un punto estratégico de la ciudad preservando además su identidad cultural y el encanto tradicional. “Un escenario de transformación en el que esta exclusiva promoción de viviendas de lujo goza de una posición privilegiada” comentan desde Ikkil Bay.
Abrir el puerto a la ciudad será uno de los grandes objetivos de este ambicioso proyecto que contará con extensas zonas verdes, instalaciones para actividades culturales y nuevas áreas peatonales. Un nuevo puerto integrado armoniosamente con la ciudad a través de la extensión del paseo marítimo y el Mirador del Carmen.
Las impresionantes vistas panorámicas completan el gran potencial de este residencial que permite contemplar tres países de un vistazo, dejándose ver al fondo de la bahía el Peñón de Gibraltar y el Norte de África, todo bañado por el intenso azul mediterráneo.
El diseño de Ikkil Bay, obra de Senda Projects y Aragón Arquitectos y ejecutado por la constructora local Jamena, destaca por una arquitectura simple pero impactante, con un edificio en forma de trapecio que se abre al mar y la luz. En colaboración con especialistas de renombre en viviendas de alta gama, se ha conseguido una síntesis perfecta entre diseño contemporáneo, exclusividad y tecnología, sin dejar de lado la sostenibilidad y la eficiencia energética.
Desde las instalaciones técnicas diseñadas por PROINSERMANT hasta la decoración interior de JA Flores, cada detalle de Ikkil Bay ha sido meticulosamente planificado para ofrecer una experiencia residencial sin igual.
Las superficies de las viviendas varían entre los 200 y los 547 metros cuadrados, y los materiales predominantes como la madera, el mármol y el cristal, reflejan una búsqueda de conexión con la naturaleza y bienestar, integrándose a la perfección con el entorno. La calidad y la excelencia se extienden a cada rincón de los apartamentos. Equipados con electrodomésticos de alta gama y lujosas instalaciones técnicas, cada vivienda disfruta de una personalidad única, ofreciendo una relación entre la arquitectura, el interiorismo y el entorno natural que lo rodea.
Ikkil Bay cuenta con zonas comunes de primer nivel, elegantes jardines con fuentes y cascadas darán la bienvenida a un residencial que gozará de instalaciones propias de un hotel de cinco estrellas como piscina interior con zona spa, baño turco, sauna y piscina de hidromasaje, gimnasio, parking con elevador de coches y un exclusivo servicio de conserjería. Todo se completa con un solárium panorámico con zona relax y una piscina infinita que parece fundirse con el mar, aportando una experiencia de vida en la orilla del mar que redefine el concepto de lujo en la Costa del Sol.